Solía pensar, que todo era perfecto..

En realidad, no se acercaba ni de lejos a la perfección. No era más que una ilusión. Una ilusión en la que yo me embarqué de lleno, como una completa estúpida, sin saber lo que ello conllevaba.
Siempre es igual, y ya estoy cansada. Él se le declara, ella como tonta, acepta y finalmente tras un tiempo, él se cansa, y la abandona. ¿Cuando va a cambiar todo esto? Yo ya estoy cansada de tropezar una y otra vez con la misma piedra. Se que dicen, que a base de tropezones se aprende, pero la verdad es que a mi no me gusta esta forma de aprender. Es más, la odio.
Supongo que sabréis mas o menos a lo que me refiero. Tal vez a alguna de vosotras le ha sucedido. De todos modos, contaré mi historia:
Sucedió hace apenas unos meses. Era de noche, y yo me encontraba sentada en la terraza de un bar con mi grupo de amigas. Se suponia que debíamos estar pasándolo bien, pero no era así. Yo estaba realmente aburrida, y sin ganas de nada. Incluso me planteé largarme de allí, pero no lo hice. Y lo agradezco, al igual que le agradezco a mi torpeza, haber hecho que golpeara un baso y que se deshiciera en mil pedazos contra el suelo. Gracias a eso, él aparecio, me miró, y sonrió. No dijo nada, pero sus ojos me transmitieron tanto...
Desde ese mismo instante, supe que aquella noche daría un giro de ciento ochenta grados. Y en efecto, asi fue. Aquel chico, entró al bar, y yo, dejando de lado toda timidez que yacía en mi, lo seguí. Lo busqué con la mirada, pero no lo encontré.
De pronto, alguien me tocó la espalda, y al girarme, allí estaba, frente a mi, con una amplia sonrisa en su rostro.
-¿Bailas?- me ofreció.
-Por supuesto.
Al de media hora todos sus amigos se marcharon, pero él no lo hizo. No, él decidió quedarse con migo. Y entonces, nos marchamos juntos.
Tras aquella noche, supé que lo nuestro fue sincero, que fue mas que un simple rollo.
Volvimos a quedar al dia siguiente, y al siguiente y al siguiente. Hasta que cada uno volvió a su pueblo.
Por suerte, solo nos separaban 15 kilómetros, los cuales podian ser atravesados siempre que quisieramos. Y asi fue, estubimos viendonos durante dos semanas, pero tras eso, algo cambió. Empezamos a vernos cada vez menos. La cosa se fue distanciando. Tal vez falta de dinero.. tal vez los estudios. No lo sé. Lo unico que sé, es que por un motivo desconocido, lo nuestro se fue apagando poco a poco, asta desaparecer. Si asi fué, se apagó, de pronto, como si la cosa no hubiera sido mas que una diversión.
Ahora sé, que para él, no fue mas que eso.
Yo me siento ridicula y avergonzada, por haber vuelto a caer otra vez en lo mismo.
Pero de eso ya me cansé. No merece la pensa sufrir por cosas sin sentido. Pasarlo mal.. ¿Para que? para eso ya hay peliculas, o simplemente la realidad de mucha gente que no tiene ni una casa, ni padres, ni agua, ni comida, ni estudios ni nada. Lo demás son tonterías que no sirven para nada.
Todos sabemos que solo existen días tristes porque nosotros dejamos que existan. Maravillosamente el tiempo no se detiene, somos nosotros quienes por desesperación nos detenemos en el..
Lo he decidido, no me pienso detener por sin-sabores y sin-remedios. Ahi afuera me esperan muchas cosas.. Y a partir de ahora cuando los bajones se acerquen.. cuando mis penas..salgan.. las miraré, pero de ningun modo, las abrazaré. Las detendré, me reiré y lloraré de alegría.. pero jamás, les volveré a seguir el juego.. Porque yo, se perfectamente el camino que debo seguir.

chloe.